vilnius, césar aira

"De pronto, como si me despertara, tuve la certeza de que lo había hecho todo mal. ¿En qué había estado pensando? No podía creer en mi imprevisión. Salvo que el inconsciente me hubiera ordenado sabotear desde el comienzo el plan. Si realmente había querido atravesar un bosque que pasaba por ser uno de los más extensos e inexplorados del planeta tendría que haberlo planificado con ayuda de expertos, acopiar víveres, armas, abrigo, una tienda portátil. Lo más básico: una brújula. Pero no, salí con lo puesto, con los mocasines y los pantalones Oxford, las llaves en el bolsillo, la billetera con los gastados billetes de la ración cotidiana. Romántico, aventurero, improvisador".

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