La ilusión de la larga noche, Inés Kreplak

Delivery

Todavía me acuerdo de los portazos

que di, los gritos que pegué

las lágrimas que lloré

pensando que nunca más

pediríamos delivery de pizza

en la plaza del barrio

No saldríamos más

a la calle

con el sifón de soda

y los vasos de vidrio

con hielo

a paliar el calor

de las noches de verano

Todo este año

me llené de planes

para evitar

que la comida y la bebida

se quedaran solas

esperándonos

Pero ahora que se acerca

de nuevo el calor

voy a sacar la reposera

y mi vaso de soda a la plaza

voy a observar los faroles

y contar cuántas hojas tiene

el plátano. Voy a pensar

si al palo borracho

le creció más la panza

si los perros que pasean

son los mismos

si el aire que respiro

se volvió más denso

si la plata me alcanza

y todavía puedo

usar la plaza como patio

y pedir delivery solo para mí.

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